jueves, 27 de septiembre de 2018



El Juego como Medio de Comunicación
Ps. Daniela Oyarzo Cárcamo






Historia del Niño
  • Pese a que siempre han existido los niñ@s, las actitudes hacia ellos han variado a lo largo de la historia.
  • Hacia finales de la edad media (1453), en occidente, predominó una postura de indiferencia.
  • Siglo IV (301 – 400), el infanticidio era una práctica habitual (género - necesidades especiales – enfermedades).
  • Entre los S. IV y el S. XIII, era muy común abandonar a los niñ@s no deseados.
  • Si los niños lograban sobrevivir, se les consideraba como adultos y formaban parte de las fuerzas productivas.
  • Participaban por completo en todos los ámbitos de la vida cotidiana: vida, trabajo, sexualidad y muerte.
  • En el S. XVI (1501 – 1600), hay mayor interés por la infancia, se crean las primeras escuelas.
  • Durante los siglos XVI y XVII (1501 – 1700), se tenía una visión moralista del niñ@, se les consideraba como “niñ@s mal@s” y se pretendía que la educación los transforme en “niñ@s buen@s”.
  • Se da un vuelco en la historia y se mira al niñ@, incluso, se censuran algunos libros porque se creía que les hacía daño a los niñ@s.
 
Siglo XX – El siglo del niñ@
  • Se reconoce a la infancia como grupo social diferente al del adulto.
  • En Chile, en el año 1989 se proclama la convención de los derechos del niñ@.
  • Se rige por tres principios básicos: provisión, protección y participación.
  • El niño ya no sólo es objeto de protección, sino que pasa a ser sujeto de derechos.
  • Derechos del niño:
  • Esencialmente proclama la dignidad y valor que tienen los seres humanos bajo los 18 años.
  • Se plantea la no discriminación del niño.
  • El interés superior del niño pasa a ser la principal consideración en la toma de decisiones.


Pese a todo esto, ¿habremos erradicado nuestra cultura adultocéntrica?

Adultismo o Adultocentrismo
Derivado de la cultura patriarcal donde, en base a estructuras de poder, ciertos grupos sociales son considerados mejores que otros.
Se pone al adulto al centro de la atención y como modelo de lo que está bien.
Desde esta lógica, ser adulto es mejor que ser niño.


Desde el adultocentrismo, el niño es:
  • un ser en vías de...
  • un ser incompleto, por ende, defectuoso...
  • los niños son los “aún no”... a diferencia de los adultos que son los “ya si”...
  • aún no adultos
  • aún no responsables
  • aún no capaces
  • aún no tienen suficiente conocimiento
  • aún no fiables
  • aún no competentes...


Desde lo relacional...
  • Se desconoce o minimiza el sufrimiento infantil:
  • son cosas de niñ@s...
  • niñ@s chicos problemas chicos...
  • Se deja a los niñ@s solos con sus:
  • Sufrimientos
  • Dudas
  • Preocupaciones
  • Inquietudes e intereses.
  • No estamos en el presente con ellos porque estamos preocupados de su futuro.


¿Qué nos dice la Biblia?

Más Jesús, llamándolos, dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios.
Lucas 18:16
Reina Valera (1960) 







Convención de los Derechos del niño y la niña Artículo 31
Los Estados Partes reconocen el derecho del niño al descanso y el esparcimiento, al juego y a las actividades recreativas propias de su edad y a participar libremente en la vida cultural y en las artes.

Historia del juego
  • No hay manera de comprender qué es el juego sin traer a la mano los sentimientos evocados por
  • este.
  • Es la actividad central de la niñez y constituye la conducta natural de los niños y niñas.
  • Los niñ@s no necesitan que se les enseñe a jugar.
  •  


Historia del juego - Rasgos distintivos
  • Es voluntario.
  • Es regulado y controlado por el niñ@.
  • Es placentero, por lo que su valor es intrínseco, y no está dirigido a metas o competencia.
  • En el juego todo puede ser posible, distinto y todo puede empezar de nuevo.
 

  Funciones del juego
El juego permite ensayar conductas o habilidades a transferir al mundo real, especialmente el futuro.
  • Flexibilidad y apertura a la experiencia
  • Conexión con otros


 Funciones del juego: flexibilidad y apertura a la experiencia
  • Ante la incertidumbre, el niño debe improvisar y generar nuevas respuestas.
  • El juego otorga un repertorio de respuestas más amplio y reduce el estrés.
  • Cuando hay sentimientos de placer en el juego, las respuestas son más flexibles.

*Esto en un marco relativamente seguro, sin sufrir consecuencias.



Funciones del juego: conexión con otros
  • Jugar con otros requiere una constante lectura de las intenciones de los demás. El niñ@ es capaz de ajustar su conducta en relación a la lectura que hace.
  • Para que el juego ocurra, el niño debe crear lenguajes y expresiones emocionales compartidas.
  • Como jugar con otros es placentero, se generan sentimientos positivos entre las personas y se fortalecen los vínculos.


El juego y el adulto
Leonor Terr (2000), El juego: por qué los adultos necesitan jugar, plantea la relación de los adultos y el juego de la siguiente manera (p.27).
  1. Como somos personas serias y ocupadas, no nos permitimos jugar.
  2. Tememos hacer el ridículo y ser infantilizados.
  3. Incluso nuestros diccionarios... omiten en general la edad adulta a la hora de definir juego.



El juego como palabras del niño
  • Los juguetes son usados como palabras por los niños, y el juego es su lenguaje... Si restringimos la comunicación a la expresión verbal, estamos negando una forma de expresión más gráfica.
  • El juego es una vía de expresión, y restringir al niño a la expresión de tipo verbal pone automáticamente una barrera de comunicación entre ellos y nosotros.
  • le transmitimos; tú debes ponerte a mi nivel y comunicarte a través de palabras.


Los videos juegos como medio de comunicación:
  • Docentes e investigadores de la Universidad de Catalunya, luego de 18 proyectos de investigación e intervención a cerca de los Video Juegos en el ámbito educativo, llegan a las siguientes conclusiones:
  • Se destaca el potencial del juego digital en el aumento de las capacidades y competencias analíticas, reflexivas y creativas de los jugadores.
  • Promueven el pensamiento estratégico de los jugadores: saber escoger entre las distintas alternativas cuál es más interesante.
  • Mejoran la resolución de problemas mediante la reflexión y la negociación.
  • Aumentan la capacidad de concentración.
  • Promueven la memoria en la recopilación de información del juego, de los personajes y de los objetivos.
  • Mejoran la planificación y la capacidad de gestionar los recursos propios.
  • Aumentan la adaptación de los jugadores a contextos cambiantes.
  • Trabajan la flexibilidad en la toma de decisiones: saber priorizar las mejoras y objetivos futuros.
  • Aumentan la implicación en los retos y objetivos y el esfuerzo y el afán por cumplirlos.

Juego como comunicación No Verbal
Cuando un niño o adulto juega, podemos observar su juego, pero también observarlos a ellos:
  • Su corporalidad, ¿está relajado o tenso?
  • Sus facciones, ¿se nota goce o que lo pasa mal?
  • Cómo reacciona con el triunfo, o con la derrota...
  • Todo esto es parte de la comunicación No Verbal...

Comunicación No Verbal
La comunicación no verbal es un tipo de lenguaje corporal que los seres humanos utilizan para transmitir mensajes, en la mayoría de casos de forma inconsciente.

La información no sólo se transmite con las palabras, sino también a través de los movimientos corporales como las posturas, las miradas, las distancias entre unos y otros, la forma de sentarse o incluso de caminar.

Comunicación No Verbal
La comunicación no verbal que va más allá de las palabras, y por ese motivo es la que transmite en mayor medida los verdaderos sentimientos o estado interior personal.

  • la postura
  • los gestos
  • la mirada
  • actitudes
  • expresión de emociones
  • acompañamiento del habla 
  • la expresión facial
  • la sonrisa 
  • emociones
  • acompañamiento del habla



En resumen...

En cuanto a los niños:
En la actualidad, los niños son sujetos de derecho, y por medio de la Convención de los Derechos del Niño, el juego pasó a ser un derecho.
Respecto a los adultos:
Aún vivimos en una cultura adultocéntrica, en donde el niño es visualizado como que “aún le falta”...
Los adultos temen al juego ya que piensan que harán el ridículo y serán infantilizados.
Juego como forma de comunicación:
El juego permite ensayar conductas o habilidades a transferir al mundo real y a futuro.
El juego es una vía de expresión, y restringir al niño a la expresión de tipo verbal pone automáticamente una barrera de comunicación entre ellos y nosotros.
En cuanto a los video juegos, estos mejoran la resolución de problemas mediante la reflexión y la negociación.

Comunicación no verbal:
Cuando un niño o adulto juega, podemos observar su juego, pero también observarlos a ellos.
La información no sólo se transmite con las palabras, sino también a través de los movimientos corporales como las posturas, las miradas, las distancias entre unos y otros, la forma de sentarse o incluso de caminar.

Conclusiones
Que nos dice el Señor...


Y dijo: De cierto os digo, que, si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos.
Lucas 18:16
Reina Valera (1960) 


viernes, 14 de septiembre de 2018


Recuerden que el próximo 26 de Septiembre a las 19:30 hrs. tendremos nuestra Charla de Café... Reserven la fecha y acompáñennos, las estaremos esperando.




viernes, 31 de agosto de 2018


LA MUJER Y EL ORIGEN DEL CUIDADO
por Saydee Pirela

Cuidar de otros es un acto inherente a la vida, es el resultado de una construcción propia de cada situación, en busca de promover, proteger y preservar la humanidad. El cuidar existe desde el comienzo de la vida y el ser humano como todos los seres vivos, ha tenido siempre la necesidad de ser cuidado y en determinado momento también nos corresponde convertirnos en cuidadores ya que necesitamos atenciones desde que nacemos hasta que culmina nuestro ciclo vital y dicho cuidado de la salud en general es asumido por la figura femenina.
La mujer ha establecido una especial relación con el cuidado de la vida más vulnerable durante toda la historia de la humanidad hasta nuestros días y su participación es relevante al estudiar la evolución histórica del cuidado enfermero y se puede observar también que este desarrollo también está estrechamente ligado al concepto salud-enfermedad que ha caracterizado cada momento histórico, por lo que se detallarán los hechos que han determinado los distintos estilos de cuidar desde el inicio de las civilización hasta nuestros días.
Para ello se tomarán como referente etapas de la historia de la enfermería las cuales son la domestica, vocacional, técnica y profesional que no tienen limites temporales definidos, pero si corresponden con momentos históricos importantes y con cuatro concepciones distintas del cuidado.

ETAPA DOMESTICA DEL CUIDADO

Esta etapa se encuentra ubicada desde la prehistoria hasta la formación de las primeras civilizaciones antiguas (Egipto, Babilonia, India, China, Nuevo Mundo, Grecia y Roma).
La participación de la mujer es muy importante, siendo la mujer de cada hogar la encargada del mantenimiento de la vida frente a las condiciones adversas del medio.
El cuidado se realizaba de manera empírica y se utilizaban elementos que formaban parte de la vida natural como el agua para la higiene, pieles para el abrigo, plantas y aceites para la alimentación y las manos como un elemento importante para transmitir calor y bienestar.
La mujer ejecutaba el cuidado relativo a la fertilidad, la lactancia y los cuidados perinatales.
Se entrelazaban diversas formas de cuidar que se conjugaban entre los saberes naturales, rituales espirituales y los nuevos descubrimientos de las nuevas civilizaciones como la creencia religiosa, trayendo consigo la aparición de figuras cuidadoras como EL chamán, brujos, hechiceros, sacerdotes, curanderos. Estas figuras variaban de acuerdo a la civilización, pero el cuidado de la mujer en el hogar se mantenía.


Esta etapa se encuentra ubicada desde el inicio del pensamiento cristiano (SIGLO I) hasta el fin de la edad moderna (SIGLO XVIII).
En este periodo histórico la SALUD-ENFERMEDAD se comienza a atribuir a los designios de DIOS y representaba una oportunidad de vida que suponía la imitación de la vida de Jesús.
El valor religioso de la salud se determinó por la convicción de que la enfermedad era una gracia del Todopoderoso, por lo tanto, el que la sufre era un elegido de Dios.
La actividad de cuidar también va a relacionarse con las creencias de los nuevos cristianos y con las normas establecidas por las ideas religiosas, como consecuencia de esta filosofía, lo verdaderamente importante era la actitud que debías mostrar y mantener las personas dedicadas al cuidado, actitudes consistentes en hacer votos de obediencia y sumisión, de actuar en nombre de Dios, de permanecer en el seno de la iglesia, de confortar a través del consejo de tipo moral y de utilizar el cuidado como un vehículo de salvación y de comunicación con Dios.
Aparece la figura de la mujer consagrada, con conocimientos técnicos prácticamente nulos pero que lo que realmente era tomado en cuenta era el cuidado que esta brindaba a los enfermos, menesterosos y necesitados.

El cristianismo representó el inicio de muchos cambios entre ellos podemos nombrar:
-  Modificación en el pensamiento de que todo hombre es hijo de Dios de manera igualitaria, lo que repercutió en la desaparición de los niveles sociales existentes en cuanto al derecho a recibir atención en situación de enfermedad.
- El cuidado de los enfermos se percibe como un mandato positivo que permite al cristiano imitar la vida de Jesús.  Representaba una oportunidad de redención tanto para el enfermo como para el cuidador.
- La iglesia resalto la misión salvadora de Cristo, por lo que fomento la creación de numerosas instituciones para el cuidado de enfermos.
- El discurso cristiano se centro principalmente en el amor al prójimo, la caridad, la misericordia y el servicio desinteresado al necesitado, sin tomar en cuenta la preparación técnica.
- Formación de congregaciones, hermandades y órdenes dedicadas al cuidado de los enfermos con una participación activa de las mujeres entre las que podemos nombrar:

- DIACONISAS: La palabra diaconisa proviene de griego Diacona que significa servir o suministrar en el sentido material o moral.
Era un grupo de mujeres de buena cuna y elevada posición social, pertenecientes a familias distinguidas, cuya labor se centraba principalmente en proporcionar auxilios a los mas necesitados y proporcionaban dinero, ropas y cuidados a las familias mas desprotegidas. Entre ellas se pueden nombrar a Olimpia y Febe, esta última fue conocida como la portadora de la Epístola a los Romanos.
ROMANOS 16:1-2
Tengo muchas cosas buenas que decir acerca de Febe, quien es líder en la iglesia de Puerto Cencreas, y ha entregado su vida al servicio del Señor Jesucristo. Recíbanla bien, como debe recibirse a todos los que pertenecen a la gran familia de Dios. Ayúdenla en todo lo que necesite, porque ella ha ayudado a muchos y a mi también.

- VIUDAS: llegaron a formar un grupo de numerosas mujeres dedicadas a la asistencia a enfermos y pobres, no eran viudas en el sentido estricto, sino que este termino se utilizaba como acepción de respeto por la edad. Desempeñaron un papel importante en la creación de hospitales.

VIRGENES: el papel que desempeñaban no esta claro, se cree que estaban dedicadas a ejercicios religiosos y se puede decir que son las precursoras de las monjas.

- MATRONAS ROMANAS: fueron mujeres ricas que atendieron enfermos, crearon los Xenodoquios (primeros hospitales y albergue a extranjeros) y los mantenían con su dinero. Se reconocen entre ellas a Marcela, Fabiola y Paula.
               
Posterior a este periodo la mujer sigue representando una figura predominante para el cuidado de la salud, lo fue la mujer feudal en el Feudalismo, y con la aparición de las plagas y epidemias como la lepra, la peste bubónica y la erisipela la ENFERMEDAD comienza a tener una connotación sobrenatural y era considerada como una consecuencia del pecado o como castigo por desaprobación divina.
Es allí cuando surgen diversas órdenes militares y religiosas que daban respuesta a la problemática de salud del momento como lo era la elevada mortalidad por las epidemias y pestes, además de los conflictos bélicos por las Cruzadas (expediciones militares que buscaban conquistar la tierra santa para difundir el cristianismo y que duraron cerca de 200 años). Dentro de las ordenes religiosas que destacaron en su servicio principalmente en el servicio a los leprosos se pueden destacar Los frailes menores, las Clarisas Pobres y Los terciarios entre otros.     

ETAPA TÉCNICA DEL CUIDADO

En esta etapa ya los avances educativos y en preparación técnica han tenido un desarrollo importante, la SALUD se entendía como la lucha con la enfermedad y como consecuencia, el saber medico se enfoco hacia la persona como enfermo.
Los avances tecnológicos aplicados a la atención medica se orientaron hacia la búsqueda de las causas de las enfermedades y su tratamiento. La nueva complejidad tecnológica requirió la aparición de personal calificado.
El cambio de pensamiento con respecto a la atención de los enfermos se hizo de manera lenta y progresiva y represento un conflicto, ya que la sociedad de la época esperaba que la mujer adoptara una conducta maternal y abnegada, sobre la base del modelo precedente, por otra, los servicios de atención de salud, organizados bajo patrones médicos, requerían cada vez más especialización en técnicas curativas y cada vez menos dedicación de corte humanista al enfermo.  
El concepto de SALUD-ENFERMEDAD comienza a tomar en cuenta factores como la economía, la clase social, la profesión, la vivienda, el entorno familiar y el nivel de acceso a los servicios de salud. Se deja de tomar en cuenta aspectos religiosos o las causas sobrenaturales para explicar los problemas de salud.
- La asistencia sanitaria deja de ser un acto curativo individual y se comienza a considerar como un derecho de todo trabajador.
La mujer toma posición en el cuidado y se genera el fin de la enfermera empírica y exclusivamente vocacional.
La mujer icono de este periodo fue Florence Nightingale (nace el 15/05/1820), fue pionera de la profesionalización de la enfermería comenzando con la organización y la educación formal de las enfermeras. Algunos de sus importantes aportes fue iniciar con la investigación, fue la primera en escribir sobre estas investigaciones, además de utilizar la estadística, la epidemiologia, los conceptos de higiene y saneamiento en la enfermería. Sus cambios repercutieron en la disminución de la mortalidad en un 40 % en heridos de guerra. 
Con respecto al cuidado enfermero, Florence Nightingale expresa que “es un arte o destreza de salud que cada madre, muchacha, esposa, maestra, niñera, cada mujer, debe aprender prácticamente”, resaltando la figura de la mujer de manera casi exclusiva para la ejecución del cuidado.

ETAPA PROFESIONAL DEL CUIDADO

En esta etapa la enfermería se consolida como una profesión, disciplina, con un cuerpo de conocimientos propio y una responsabilidad definida en la atención a la salud de la población, siendo de gran importancia y aporte social en cuanto a los servicios brindados no solo al individuo sino a la comunidad en general.
Una vez estudiada la evolución histórica del cuidado y la importante participación femenina podemos ver como dentro de cada hogar la mujer asume el cuidado de los demás como:
- Un compromiso moral
- Natural
- Marcado por el afecto
-Actividad que representa social y económicamente un elevado costo
-Definido como responsabilidad casi exclusiva de la mujer (en el hombre es opcional)
-Deber sancionable
-No Valorada / no remunerada            
-Deber cristiano.

Sea cual sea la motivación que exista al momento de cuidar, servir y ayudar a otro, la palabra de Dios nos recuerda en Miqueas 6:8
Pero Dios les ha dicho que es lo mejor que pueden hacer y lo que espera de ustedes. Es muy sencillo: Dios quiere que ustedes sean justos los unos con los otros, que sean bondadosos con los mas débiles, y que lo adoren como su único Dios.

El mensaje que Jesús compartió en el inicio del cristianismo sigue vigente, ese mensaje que movió a muchas mujeres de fe a brindar su atención a los mas necesitados no ha cambiado, sin  embargo nos enfrentamos a nuevos retos y necesidades distintas, quizá no tenemos de manera visible y tangible a los leprosos del nuevo testamento, pero tenemos muchas oportunidades de servir y de ser de bendición, de poder mostrarle el rostro de Cristo a través de nuestras obras a los que en esta momento y en esta ciudad requieren de la mano amiga y del amor de Dios de manera desesperada.

Cuando analizamos las estadísticas, en Chile con una población de 17.574.003 personas podemos observar:
- Existe un importante porcentaje de personas que existe la sospecha de que sufren depresión, de los cuales el (21,7 %) son mujeres, de las cuales el 2,8% asegura haber tenido ideación suicida en los últimos 12 meses.
- Adultos mayores de 65 años / dependientes 2.800.000 lo que equivale al 16.2%
- Sename, en el año 2017 se atendieron 194.000 niños de los cuales el 91% fueron consultados por protección de derechos.
- Discapacitados. Según cifra FONADIS 16,7% población.
- Extranjeros. Según ultimo censo existen 746.465 migrantes. Representan un 4% de la población total.
- Problemas con el consumo de drogas

En la actualidad somos llamadas a seguir impulsando el cuidado desinteresado, la abnegación y la vocación en un intento de imitar a Dios como sus hijas amadas que somos. (Efesios 5:1)
En Isaías 58 se explica el ayuno que a Dios le agrada, nos insta compartir el pan con los que tienen hambre, dar refugio a los pobres, vestir a los que no tienen ropa, y ayudar a los demás, además nos promete que, si ofrecemos pan al hambriento, brillaremos como luz en la oscuridad, como la luz del medio día, nos insta a reconstruir ruinas antiguas, reforzar los cimientos antiguos y nos llamaran “mujeres reparadoras de muros caídos”, “reconstructoras de casas en ruinas”.

Es un gran compromiso, pero Dios promete apoyarnos y darnos las fuerzas necesarias, solo debemos decidir ponernos a disposición de aquellos que nos necesitan, ¡¡anímate!!

martes, 21 de agosto de 2018



Recuerda este 29 de agosto tendremos nuestra Charla de Café


Cuidar a otro es un acto inherente a la vida, es el resultado de una construcción propia de cada situación, en busca de promover, proteger y preservar la humanidad. 

El cuidar existe desde el comienzo de la vida; el ser humano como todos los seres vivos ha tenido siempre la necesidad de ser cuidado y el cuidado de la salud en general es un trabajo asumido por la figura de la mujer. 


A través del tiempo el cuidado de la salud ha tenido un desarrollo estrechamente ligado a hechos históricos que van a determinar los distintos estilos de cuidar desde el inicio de las civilizaciones hasta nuestros días. 

Se puede observar como la mujer ha tenido una participación importante en cada una de las etapas de desarrollo del cuidado, otorgando atenciones y cuidados a los suyos que se mantienen vigente hasta este tiempo. 


Analizaremos dicha participación femenina y que oportunidades tenemos en la actualidad de servir, cuidar y de brindar ayuda a otros siendo portadoras de un mensaje de salvación que nos insta cada día a preocuparnos por los demás.



viernes, 3 de agosto de 2018


Migración: Reflexiones sobre establecidos y extranjeros.
Autor: Claudia Mardones

La Migración es un tema que nos es cada vez más familiar y aunque tal vez no sepamos con exactitud cómo definirlo técnicamente, sabemos que consiste en el flujo o movimiento de personas de un lugar a otro.

Según el último censo realizado el 2017[1], la población total de Chile alcanza unas 17.574.003 personas, de los cuales 7.112.808 viven en la Región Metropolitana. En esta región, un 7% corresponde a migrantes internacionales y un 10 % pertenece a pueblos originarios.

Como sabemos, la Migración es un proceso a nivel mundial. No somos los únicos que nos hemos tenido que acostumbrar a compartir con personas que tienen otras costumbres, otras creencias e incluso otro idioma. Seguramente habrán escuchado sobre el muro entre Estados Unidos y México, que el presidente D. Trump está muy interesado en construir para frenar la migración, o la triste noticia de los niños que hace poco fueron separados de sus padres, también en Estados Unidos y que, poco a poco, intentan volver a reunir después del repudio mundial.

Para algunas personas, la llegada de estos extraños que llaman a la puerta, “tiende a causar inquietud precisamente por el hecho mismo de ser extraños, es decir aterradoramente impredecibles, a diferencia de las personas con las que interactuamos a diario” (Bauman, 2016:15). Lamentablemente, la migración también ha generado un aumento de conductas xenofóbicas, racistas y chovinistas.[2] Y como dijo el pastor bautista, Martin Luther King, los seres humanos “hemos aprendido a volar, como los pájaros, a nadar como los peces; pero no hemos aprendido el sencillo arte de vivir como hermanos”.

El tema que nos convoca se inspira en un ensayo sociológico realizado por Nolbert Elías, titulado “Ensayo acerca de las relaciones entre establecidos y forasteros”[3]. Allí, el autor estudió cómo son las relaciones en una comunidad urbana, llamada Winston Parva, la cual mostraba una profunda división en su interior entre dos grupos de clase obrera: los establecidos y los forasteros. Lo interesante del estudio, es que es posible observar este mismo tipo de relación entre otros tipos de grupos, “bien se trate de…blancos frente a negros, gentiles frente a judíos, protestantes frente a católicos, y viceversa, hombres frente a mujeres…” (Elías, 1965: 220) que al igual que los establecidos de esta comunidad, se perciben así mismos como superiores y mejores seres humanos que los forasteros, a quienes veían como inferiores. Este ensayo, por lo tanto, puede servir como un modelo aplicable a otras figuraciones más complejas. El autor asegura que esta “es la misma imagen de sí mismos habitual entre aquellos grupos que, en lo concerniente a su grado de poder, son superiores a otros grupos interdependientes” (Elías, 1965: 220).

¿Pero a qué conclusiones llegó? N. Elías se dio cuenta que los establecidos evitaban todo tipo de relación con los recién llegados, los excluían, los consideraban desarraigados, por eso los denominaban forasteros. Pero, además, los estigmatizaban, los creían mal educados y sucios, por lo cual los consideraban inferiores. Mientras que los forasteros, parecían aceptar estos calificativos, señala el autor, con una resignación desconcertante. Lo curioso es que no había ninguna otra diferencia entre ellos, no había diferencia de clases social, ni ocupación (eran todos obreros), ni de nacionalidad, ni de origen étnico o color de piel, lo único que los diferenciaba era haber llegado a esa comunidad en tiempos diferentes, unos eran residentes antiguos y otros eran recién llegados.

Pero ¿Qué llevaba a los establecidos a erigirse como superiores ante los forasteros? El autor llega a la conclusión que los establecidos, tenían un grado de cohesión grupal que les permitía una identificación colectiva y la construcción de normas valoradas y respetadas a nivel de comunidad. Esa cohesión grupal ejercía al mismo tiempo un alto grado de control social, lo que facilitaba el distanciamiento con el grupo extraño de forasteros. Estos últimos eran extraños no solo para los establecidos, sino también entre ellos mismos.

Pero ¿Qué relación encontramos entre los establecidos y los forasteros de N. Elías, y el tema que nos convoca -Migración: Relaciones entre establecidos y extranjeros?
Nuestra sociedad actual día a día se está conformando y configurando con la llegada de nuevos individuos, que tal vez percibimos como extraños ya que son de otras naciones, tienen una cultura diferente, otras costumbres y prácticas, hablan otros idiomas, practican otra religión, etc. Y también es probable que, por vivir en esta ciudad, al momento de la llegada de los inmigrantes nos sintamos con más derechos que ellos, nuestros lazos de amistad estén más cohesionados, y gocemos de un cierto estatus en el trabajo o la iglesia, lo que nos hace sentir mejores. No obstante, es posible también que estemos pensando en algún amigo extranjero, al que hemos aprendido a querer y aceptar, pero ¿Nos pasa lo mismo con todos los extranjeros que están llegando a nuestro país? ¿Cómo son nuestras relaciones con aquellos que sentimos o percibimos como extraños? ¿Será que nuestra cohesión grupal, nos hace tener un trato diferencial con algunas personas? O ¿Podemos decir que nuestras relaciones interpersonales son horizontales, de igual a igual con todos?

Para muchos, la llegada de olas migratorias causa más bien temor, se piensa, tal vez, que su llegada puede alterar la posibilidad de conseguir alguna vivienda social, u obtener algún trabajo ya que, al aumentar la obra de mano más barata, o quizás al revés, al aumentar la oferta de trabajadores cualificados, las posibilidades de empleo son menores. Quizás para otros el temor está asociado al aumento de la violencia, el cual vinculan consciente o inconscientemente con la llegada de algunos extranjeros.

Mantener la paz y el orden en la sociedad es algo que todos deseamos, pero es algo que se teme perder cuando llegan personas que no conocemos o que no conocen nuestras leyes. Existe el temor a que los extraños desestabilicen la cohesión que como comunidad hemos construido.

¿Pero qué pasa con los extranjeros, qué sensaciones, qué pensamientos traen? Por lo general, incertidumbre, desesperanza, ilusiones rotas, etc. Si bien podemos agrupar a los inmigrantes en dos grupos generales, a unos que migran por decisión propia buscando mejores oportunidades en educación, trabajo y a otros que migran porque no tienen otra opción, porque han tenido que escapar de sus países debido a guerras, conflictos políticos, persecución religiosa, o porque de donde vienen no hay nada que los impulse a salir adelante, debemos reconocer que cada inmigrante trae consigo una historia singular, una realidad vivida irrepetible. Podríamos hacernos una vaga idea sobre sus sentimientos, sensaciones, pero sólo son comprendidos por aquellos que han vivido circunstancias similares como extranjeros y que, en muchos casos, han tenido que aceptar un trato humillante por parte de los establecidos.

La teóloga Nancy Bedford (2016), trabajó el tema de la migración desde su propia experiencia al vivir como extranjera. La autora plantea que Jeremías 29: 5-7 fue un pasaje bíblico inspirador en esa etapa de su vida.
«Construyan casas y habítenlas; planten huertos y coman de su fruto. Cásense, y tengan hijos e hijas; y casen a sus hijos e hijas, para que a su vez ellos les den nietos. Multiplíquense allá, y no disminuyan. Además, busquen el bienestar de la ciudad adonde los he deportado, y pidan al Señor por ella, porque el bienestar de ustedes depende del bienestar de la ciudad».
Jeremías 29:5-7 (NVI)
Pero ¿Por qué era tan importante, establecerse para los israelitas cuando fueron exiliados en Babilonia y no pensar que sólo estaban de paso? Porque era la nueva tierra que Dios le había dado, no habría otra por un largo tiempo. Y mientras ese lugar tuviera paz y bienestar, ellos también podrían tener una vida de paz. La autora, no obstante, aclara que este ejercicio de “plantar, construir o traer hijos al mundo en este contexto no constituye una simple asimilación a la cultura dominante, sino que es una forma de resistencia y de negociación que permite recrear la cultura y las creencias de origen en una nueva situación”, la autora incluso agrega que la “asimilación de Jeremías 29 no apunta a un suicidio cultural…sino todo lo contrario (Bedford, 2016: 280). La idea de habitar otro lugar, con otras creencias y culturas, si bien puede incluir un proceso de adaptación al nuevo medio, a los modismos del lenguaje o a ciertas prácticas, no significa borrar la propia identidad, sino todo lo contrario, significa recrear y resignificar las creencias y la cultura de origen. Como señala Bedford es una forma de negociación entre lo local y la cultura de origen, para la configuración de la propia subjetividad. De esta manera, debieron “reinventarse como pueblo seguidor del Dios del Éxodo, dando pie al judaísmo de la diáspora que ha podido mantenerse de diversas maneras hasta hoy” (Bedford, 2016: 280).

Tengamos presente que nuestra forma de referirnos o tratar a los demás afecta la construcción de identidad de los demás, pero también nuestra propia identidad, quién creemos ser. De ahí la importancia del respeto al otro, respeto al extranjero, al que es profesional y viene con una buena situación económica, pero también a aquellos que no han tenido la oportunidad de superación. Si bien entre ellos y nosotros hay diferencias externas, ya que cada ser humano es único, ante el Señor, nuestro creador no. “Tú y el extranjero son iguales ante el Señor” (Núm. 15:15).
Recuerdan ¿Qué le dijo Dios al pueblo de Israel, sobre cómo tratar a los extranjeros?
“Cuando algún extranjero se establezca en el país de ustedes, no lo traten mal.  Al contrario, trátenlo como si fuera uno de ustedes. Ámenlo como a ustedes mismos, porque también ustedes fueron extranjeros en Egipto. Yo soy el Señor y Dios de Israel”.
Levítico 19:33 y 34  (NVI)
Dios no quería que Israel olvidara su pasado como extranjero, ya que teniendo en la memoria lo que es vivir como extranjero, les sería más fácil amar y dar un buen trato a los extranjeros que habitaban en medio de su comunidad.
En Jeremías 22:3  (NVI) también encontramos:
“Así dice el Señor: ‘Practiquen el derecho y la justicia. Libren al oprimido del poder del opresor. No maltraten ni hagan violencia al extranjero, ni al huérfano ni a la viuda, ni derramen sangre inocente en este lugar”
Nuestro deber como hijas de Dios, es acoger al extranjero en nuestra sociedad y en nuestra comunidad. Debemos ver a los extraños como uno de nosotros, y reconocer que tienen el mismo derecho a vivir y establecerse en esta tierra. Debemos orar por ellos para que les vaya bien, igual como queremos que nos vaya a nosotros. Recordemos las palabras de Pedro en Casa de Cornelio:
“Ahora comprendo que en realidad para Dios no hay favoritismos”
Hechos 10:34b (NVI)
Como hijas de Dios, también debemos, practicar nuestra fe sin favoritismos.
Hermanos míos, la fe que tienen en nuestro glorioso Señor Jesucristo no debe dar lugar a favoritismos.
Santiago 2:1(NIV)
Además, debemos reconocer que todos estamos de paso en esta tierra, y que nosotras, como hijas de Dios, somos extranjeras en este mundo, ya que nuestra verdadera ciudadanía está en los cielos:
En cambio, nosotros somos ciudadanos del cielo, de donde anhelamos recibir al Salvador,       el Señor Jesucristo”.

Filipenses 3:20 (NVI)



Bibliografía
Elías, N. (1965). “Ensayo sobre las relaciones entre establecidos y forasteros”. Disponible [En Línea] https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/832111.pdf, consultado el 13 de julio de 2018
Bauman, Z. (2016). Extraños llamando a la puerta (1ªEd.). Buenos Aires: Paidós.
Bedford, N. (2016). “La subjetividad teológica en movimiento: reflexiones desde una teología feminista en la migración”, en Teología feminista a tres voces (pp.277-310). Santiago de Chile: Ediciones Universidad Alberto Hurtado.


[2] La xenofobia es el miedo, rechazo, desprecio u odio al extranjero, puede incluir agresiones verbales o físicas. El término chauvinismo o chovinismo hace referencia a la preferencia excesiva por todo lo nacional con desprecio de lo extranjero.
[3] Este trabajo lo realizó en conjunto con  John L. Scotson, en 1965. Disponible [En Línea] https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/832111.pdf, consultado el 13 de julio de 2018